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domingo, 30 de septiembre de 2012

Densidad solidaria

Diario EL PAIS 28 SEP 2012 - 19:23 CET
Enrique F. Rojo traza en un libro el origen y despliegue del barrio de La Prosperidad

Oír hablar en Madrid de La Prospe dibuja en los semblantes de quienes conocen la ciudad un gesto de simpatía. Su nombre designa uno de los barrios populares más entrañados con el micro-universo madrileño. Debe tal denominación a uno de los promotores pioneros del barrio, llamado Próspero, así como al sentido anhelo de éxito vital para un espacio suburbial de nuevo cuño, proletario, que nacía mediado el siglo XIX como un primer estirón del Ensanche municipal de Carlos María de Castro. Gracias a esta ampliación capitalina, que comprendía casi 2.300 hectáreas, Madrid comenzó a trascender la muralla sanitaria y fiscal, de tres metros de altura, que cernía la ciudad desde 1625.
Hoy, La Prosperidad queda dentro del Distrito de Chamartín, donde se ubica junto a los barrios de Ciudad Jardín y El Viso, a la vera de la autopista de Barajas. Su caserío figura entre los más densamente edificados de la ciudad. De raigambre social obrera, sus primitivas fábricas, sobre todo tejares, atrajeron hacia sí población inmigrante de La Mancha, Extremadura y Andalucía. De su origen y despliegue da cuenta un libro recientemente editado y con numerosas fotografías de álbumes privados, cuyo autor es Enrique F. Rojo, crecido junto a este barrio que conserva a duras penas trazas de su primitiva configuración. La Prospe pasó de un hábitat disperso, casi rural, a otro adensado por la presión demográfica. En verdad, nunca destacó por su belleza. El capital privado tampoco fue generoso a la hora de embellecer entornos proletarios, pero la belleza principal de La Prosperidad, seña de identidad barrial madrileña, fue la constelación de relaciones solidarias que generó entre sus moradores. Aún hoy, pasear por sus estrechas calles, donde quizás pervive algún edificio de dos plantas y fachada neo-mudéjar, permite comprobar lo lábil y entrañada que resulta la frontera entre la vida privada y la pública, como sucede en los pueblos; pero en esta ocasión en un barrio signado durante décadas por estela de la solidaridad afable, la ayuda mutua y la cercanía.
 La Prosperidad (1862-2012). Por Enrique F. Rojo. 179 páginas. Ediciones La Librería.Temporae. Barrios de Madrid. 14.90 euros.
http://ccaa.elpais.com/ccaa/2012/09/28/madrid/1348849892_937272.html

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